Evaluar el desarrollo actual de la economía agrícola en Paraguay, debería significar analizar el desarrollo de la gran producción mecanizada, la difusión del cultivo de la soja, la situación del pequeño productor y de la agricultura familiar en el marco de los modernos agronegocios, el nivel de utilización de semillas transgénicas y de agrotóxicos en el país, las nuevas fronteras de la producción agrícola no tradicional, o cómo en todo esto consigue sobrevivir la agricultura indígena. Todos esos temas están presentes en esta edición de la revista Novapolis, pero no están al centro del debate referente al futuro de la economía agrícola nacional.
Hoy el centro del debate sobre el futuro de la agricultura en el país se define en pocos y específicos temas: si la resistencia pacífica del campesinado a la latifundización de la producción agrícola actualmente vigente tendrá éxito, o si los mismos continuarán siendo expulsados hacia las periferias marginales urbanas; pero sobre todo: qué rol jugará en este proceso de reorganización productiva del campo la acción violenta y armada del autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo.